Saben aquel que dice…. Un párroco con imaginación, quiere que sus fieles mantengan la compostura en la iglesia, en estos tiempos convulsos de la era tecnológica en la que todos estamos conectados las 24 horas del día, y no precisamente con Dios. Bien pues la más que lógica razón lleva al párroco a enviarles este mensaje desde la mismísima puerta de la parroquia: